El día de hoy la Suprema Corte de Justicia de la Nación de México votó -4 a favor 1 en contra- por la legalización de la marihuana con fines lúdicos y sin ánimo de lucro, para quienes presentaron el amparo. Esto abre toda una perspectiva nueva sobre la política y la visión en torno al cannabis. Aprovechamos para preguntarle a Jorge Hernández Tinajero aka Calamar, uno de los activistas cannábicos más sonados del país, ¿Por qué debería legalizarse la marihuana?
Porque es la puerta de entrada a otras drogas. Falso. Epidemiológicamente hablando, está más que probado que es la edad de inicio el factor clave para la progresión en el uso de cualquier sustancia. En este sentido, el alcohol y el tabaco, ampliamente aceptados y promovidos por nuestra cultura, son las puertas de entrada al consumo de sustancias psicoactivas, incluso desde los 11 o los 12 años de edad.
Porque es imposible según los tratados internacionales. Otra falsedad, que requiere matices. Los tratados, a pesar de ser anacrónicos, ideológicos e inaplicables en muchas de sus disposiciones, permiten ciertos usos -los médicos y científicos- y se limitan a prohibir los mercados legales. Algo que podría ser aprovechado, por ejemplo, para crear sistemas de producción-consumo sin fines de lucro a través del cultivo personal o asociado.
Porque es dañina para la salud. Una afirmación así no solo es sesgada, sino matizable en muchos sentidos. Si prohibir todo lo que hace daño fuera una política eficaz y positiva, más de la mitad de lo que consumimos o usamos diariamente estaría en la ilegalidad. Todo puede ser dañino en esta vida, dependiendo de cómo se utilice o consuma. Con la mariguana pasa lo mismo.